Mi querido Guadalcanal

Soñé que volvía,
después de mucho tiempo,
a mi pueblo.
Allí me encontraba
con árboles del Palacio
y vistas de Santa Ana.
Recorría algunas calles
y saludaba a los vecinos.
Quedaba con amigos
y me tomaba un café
en la Puntilla.
Alguna gente me preguntaba por mi vida
y yo contestaba.
Ya despierto
pensaba en el sueño
y me acordaba de mi infancia
y juventud,
de mis seres queridos.
Algún recuerdo me hacía llorar un poco
y otros sonreír.
Aquí tan serrano,
tan de Extremadura y Andalucía,
con tantas tradiciones…
Llegué a pensar que era un buen lugar
al recapitular,
y cómo no quererlo
si son sus momentos
y vivencias
las que corren por mis venas.
Un pueblo con mucha alma,
especial si me preguntan
y siempre en mi corazón,
donde he de volver,
si cierro los ojos,
donde he de soñar
si me «despierto».
Mi querido Guadalcanal
que me ha dado tanto…


Jaime Garzón Rivero