E
El último Demonio
El último Demonio,
susurraba una canción.
Entre dientes mascullaba maldiciones.
Levantó el viento polvo del camino
mientras caminaba frente al ocaso.
Nadie lo miraba
e iba muy solo.
Odiaba el Cielo y a la gente.
Hizo el mal hasta que pudo
y su sonrisa
era irascible y perturbada.
Se dirigía a su fin
lleno de remordimientos,
con la cabeza castigada por
la conciencia de tantos crímenes.
Allá en su alma
se perdió el último Demonio.
Jaime Garzón Rivero