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Las Dagas

Las Dagas que no se ven
y se esconden en el sendero.
La envidia, el odio, la desesperación…
Largos trozos de vida,
continua pero cambiante.
Y el pasado, a veces cruel,
trae rencores antiguos.
Las Dagas en el camino,
la navaja que se clava en el vientre
y nos da la muerte.
Y los solitarios que se pierden,
y los valientes que encuentran líos,
y una hambruna, una injusticia,
una guerra…
Para qué quieres más.
Y siempre habrá en contra alguien
porque se lucha, se vive,
se desea.
Las Dagas traicioneras
nos esperan a todos,
arreglos de familia y de sangre,
de sangre por las venas que arde,
si te hacen algo
o a los tuyos.
Ciertamente, a veces,
son justicia.

Jaime Garzón Rivero