S

Solillo por la Vida

¿Cómo vive uno solillo?
Preguntando por ahí,
¿dónde está esta calle?,
¿sabe si hay algún supermercado cerca?
Vas andando y te pierdes.
No importa mucho,
la calle es tuya,
eres vagabundo,
y en cualquier portal puedes dormir.
Y entras a la mañana en una iglesia,
y buscas también en la basura.
Pides un cigarrillo,
unas monedas,
pasas frío, te mojas un poco,
vas conociendo gente
hasta de Cáritas y Cruz Roja.
Alguien te regala una sonrisa en la mañana
y te recomiendan un albergue.
Te cansas ya e intentas prosperar
buscando algún trabajo.
Procuras no ir muy sucio nunca y oler bien,
y cuánta chica guapa…
Un corazón a tu lado…
Pero vas solillo,
y sabes que eres fuerte,
«esto no lo aguanta cualquiera».
El día que salga de esta situación,
me sentiré muy satisfecho.

Jaime Garzón Rivero