En el sindicato, me ofrecieron un empleo.
Yo quería un despacho, pero estaban ocupao.
Con tó la choricería, de Andalucía,
Me metí en la junta, y en la consejería.
Voté a podemos. La caña a un euro.
En mi oficina. Esto es Palermo.
Ahora que trato, con grandes señores,
Y que dirijo, el área del pensionista,
Le di una paga, a mi tía dolores,
Que era la hermana, de chaves y griñán.
Me fui a la cartuja, obra del recio,
Y allí me esperaban, con una maletita.
Me fui de viaje, con el guerrero.
Desde Felipe, nadie hay más bueno.
Voté a podemos. La caña a un euro.
En mi oficina, esto es Palermo.
Verychero Dhadra